Bizcochitos de chocolate y cereales

Siempre creí que cuando no quedan palabras que decir es cuando empezamos a admitir que algo ha terminado, 20160413_162035se acaba un libro tras esa última palabra seguida de un punto y una hoja en blanco; terminamos una exposición después de un monólogo en el que agotamos hasta nuestro último conocimiento del tema,  y se acaban las discusiones importantes si tras las palabras de algunos de los implicados nadie tiene más que decir.
Y es en el momento en que no quedan palabras pero si la necesidad de que algo no termine para siempre, cuando reconocemos que hay infinidad de cosas que no se dicen pero que se pueden hacer para seguir adelante. Incluso en aquellos recuerdos de momentos que perdimos hace tiempo y que rememoramos en nuestro interior a sabiendas que no volverán, podemos hacer algo.

Eso es lo que hago hoy; estoy recordando, sin añoranza ni nuevos deseos, momentos que no se volverán a repetir pero que formarán parte de mi vida porque han contribuido a ser quien soy, y como soy.20160413_161523

Estamos a mitad de la Feria de Abril de Sevilla, y desde hace unos días le vengo vueltas a algunas recetas que pusieran en pie lo que me ha gustado siempre esta fiesta, que aportaran mi granito de arena al sentir popular; pero a parte prepara «pescaíto frito» y tomarme -en casa- alguna copa de manzanilla, no había ningún plato que pudiera representar lo que durante años esta fiesta me aportó:

un puñado de risas sinceras, compromisos laborales que se transformaron en amistad, bailes, anécdotas, confidencias en un coche de caballos… ay Elena, que bien sabes tu a que me refiero.

Hace años que no pongo un pié en el Real de la feria, pero no la extraño, no deseo volver -por ahora- porque los momentos maravillosos, que otras circunstancias en otra etapa de la vida, ocurrieron bajo unos farolillos no se pueden clonar.

Pero me queda el recuerdo, las vivencias y el sentir de vuestra sonrisa en mi nuca. Y como un plato de pescaíto frito no traían al presente mis sentimientos, mejor nos deleitamos con estos bizcochitos de chocolate y cereales, que me han sabido a gloria, a momentos felices y que espero que esta noche hagan el disfrute de los amigos que espero para cenar.20160413_161448

La receta es una adaptación de los moelleux de chocolate que aparecen en el volumen nº 14 del coleccionable de Planeta Deagostini: «Pan, dulces y pasteles». He preparado la receta original pero el sabor a chocolate era demasiado intenso, demasiado dulce para mí y la textura muy parecida a un brownie, así que adaptandola a mis gustos, he añadido un poco de levadura, quitado chocolate y azúcar y sustituido los piñones que ponen en la receta por un mix de semillas y frutas secas que compré el Lidl hace unos días.

Espero que os guste!

INGREDIENTES:

3 huevos

80 gr de harina de trigo

110 gr azúcar

150 gr mantequilla con sal

90 gr de chocolate negro (70% cacao) para fundir

80 gr de semillas o cereales para el desayuno

1 cucharilla de café de levadura tipo Royal

Precalentar el horno a 180 grados con calor arriba y abajo. Engrasar un molde cuadrado de 24 cm (si utilizáis uno de silicona no es necesario engrasar).

Repartir los cereales por la bandeja del horno y hornear unos 5-6 minutos. La idea es que se tuesten un poco y pierdan la poca humedad que puedan tener, con cuidado no se vayan a quemar. Reservar para que se enfríen.20160413_133515

Fundimos el chocolate al baño María o en el microondas calentandolo a intervalos de 30 segundos y sacando y mezclando hasta que esté completamente fundido. Reservamos.

Disponer en un bol la mantequilla troceada a temperatura ambiente para que esté blandita, añadir el azúcar y remover con una varilla hasta que tengamos una crema blanca y espumosa. Podéis hacerlo con la varilla eléctrica aunque a mano también se mezcla muy rápido.

Añadimos los huevos a la crema uno a uno, mezclando para integrar bien antes de añadir el siguiente.

Mezclar la harina con la levadura y añadir a la masa. Seguir mezclando con la varilla hasta que la harina esté completamente integrada.20160413_134823

Añadir el chocolate fundido y los cereales y volver a mezclar. Es muy importante que mezclemos bien todos los ingredientes para que el color del bizcocho sea homogéneo y la levadura quede repartida por toda la masa al subir en el horno no se formen picos.20160413_135120

Verter la masa sobre el molde que teníamos engrasado y hornear 20 minutos. Pasado el tiempo, pinchamos en el centro del bizcocho con un palillo y si este sale limpio el bizcocho estará listo, sino, dejarlo cocer unos minutos más.

Sacamos del horno, dejamos enfriar unos minutos, desmoldamos y dejamos enfriar sobre una rejilla.

Con el bizcocho totalmente frío, cortar en rectángulos o cuadrados, la idea es hacer porciones individuales, y listo para comer.

Podéis incluso envolverlos en film transparente y guardarlos en una bolsa bien cerrada o en una lata para tomar al día siguiente en el desayuno… los míos no se si durarán tanto.20160413_161958

Buen provecho!

8 comentarios en “Bizcochitos de chocolate y cereales

  1. Seguro que los amigos que esperabas para cenar quedaron felices de compartir una cena fantástica que incluía unos bizcochitos llenos de chocolate y cariño. Es cierto, lo que fue ya pasó, pero algo de ello impregna nuestro presente, como un aroma que no termina de desaparecer. Si acercamos mucho nuestras naricillas mentales a aquellos pedacitos de vida hechos recuerdos, podemos seguir viviéndolos desde la distancia que construye el tiempo. Un besote Noe!

    Le gusta a 1 persona

    • Preciosas palabras!! Y nunca mejor expresado. Me gusta mirar atrás cuando ha pasado tiempo suficiente para que la añoranza no duela y saber que todas las experiencias vividas, buenas y malas siguen con nosotros al igual que las personas porque aportaron su granito de arena a que ahora seamos como somos. Solo pido que la arenilla que llo haya dejado en ellos sea al menos la mitad de satisfactoria que la que yo me guardo en los bolsillos.
      Por cierto los pastelitos y una tarta de cumpleaños de mandarina fueron muy buen acogidos tras una cena ligera a base de ensalada de cous cous y un lomo a la sal. Pero era fácil acertar: los comensales fueron mis mejores amigos y mi pareja… conocen bien mi cocina y yo sus gustos! Un besote y gracias por palabras tan bellas.

      Le gusta a 1 persona

  2. ¡¡Hola Noelia!! Yo también estoy comprando este coleccionable de pan, dulces y pasteles, pues este verano quiero ponerme a hacer pan, pues la panadería que voy siempre, que son amigos, cierran un mes entero en verano por vacaciones, y como el pan de la otra panadería no me gusta mucho, voy a intentar hacerlo en casa, aunque haga un calor que te derrites entera, ja, ja. Ya veremos como acaba el experimento. Luego, puede que me de pereza o me pille que nosotros también estamos de vacaciones fuera y ni haga pan.
    Ahora no recuerdo estos bizcochitos, eso es que los tuyos me han llamado mucho más la atención que los del coleccionable, y si lo has puesto más a tu gusto, seguro que han salido más esponjosos y ricos. Este tipo de bizcochos para empezar el día son fantásticos, te dan energía y te aportan toda la fibra de los cereales. Y nos los has presentado tan bien, que los has hecho el doble de apetecibles. Además, así tienen la medida justa, para no pasarnos tampoco, que yo me conozco, empiezo y no paro, je, je.
    Es cierto que, a veces, da un poquito de pena saber que hay ciertas cosas que ya no van a volver, pero lo mejor de todo, es poder haberlas vivido y recordarlas. Besitos.

    Le gusta a 1 persona

    • Gracias Isa!! Estos bizcochos vienen en el cuaderno 14 creo, repostería clásica francesa y sin querer alardear mi adaptación me ha gustado más que el original, que es demasiado empalagoso. El verano, a pesar del calor es la mejor época ñara que fermenten las masas de pan, yo ya he preparado algunos en casa y aunque amasando a mano parece que la receta nunca va a quedar bien, todos los que he probado han sido un éxito!! Me gusta recordar las viejas costumbres con una sonrisa, y no me da pena que no se repitan, porque con los años hay cosas que no son igual, ni mejor ni peor, solo distintas y no quiero que esos fantásticos momentos se emborronen por intentar repetirlos de modo forzado. Un besazo!!

      Me gusta

Deja un comentario