Juego de blogueros 2.0.: Bizcochitos de mandarina con cobertura de chocolate a la hierbabuena

No se si empezar la entrada pidiendo perdón o diciendo ¡sorpresa!

Sorpresa porque solo es miércoles y me he adelantado un día en la publicación, y disculpas porque la semana pasada se me olvidó avisaros de este cambio de horario.

Aunque tengo que deciros que… no fue un olvido en sí, hace días que tengo metido en la cabeza que el 30 de Noviembre, último día del mes y momento de exponer las recetas de Juego de Blogueros, era el próximo jueves. No se si por querer alargar un día más el mes y tener más tiempo para conseguir una receta, salada y marinera, para esta edición del juego; o simplemente porque un día miré mal el calendario y me dije a mi misma que ambas cosas coincidían, que claro está, me he echo un lío con las fechas.

Por un motivo o por otro, en la eufórica entrada de la semana pasada, no os comenté que adelantaba la receta para hoy miércoles, y aquí estamos.

Llega un mes más el Juego de blogueros, donde, como ya sabéis todos, un grupo de cocinillas nos reunimos a través de un grupo en redes sociales y elegimos un ingrediente de temporada, con el que cada blog debe realizar una receta que todos publicamos a final de mes y a la misma hora. El ingrediente elegido para este Noviembre ha sido, como podéis apreciar en el título de la entrada: la mandarina.

Y vaya mes más complicado para cocinar con ellas. Me encantan las mandarinas, pero utilizar un cítrico como ingrediente principal de un plato y no como un aditivo… ha sido muy difícil para mi. La idea inicial era preparar un plato salado y marino, como os anunciaba en unas líneas más arriba,  pero a pesar de probar las distintas elaboraciones que flotaban por mi cabeza, el plato final no terminaba por definirse ni en mi interior ni en la cocina.

Pues a falta de unos días para esta cita, me veía sin receta, así que tuve que sucumbir a los encantos de los dulces, que para eso sí tenía muchas ideas de como manejar las mandarinas y el fin de semana elaboré estos bizcochitos. La receta original es para un pastel grande y lleva cobertura de merengue de coco, y ya conocéis mis animadversión por el coco, así que mejor chocolate. Además he variado las cantidades de azúcar y añadido otros aromas y sabores, como el agua de azahar y la hierbabuena a la cobertura. El resultado son unos pastelitos jugosos, esponjosos, con un intenso sabor a mandarina, que no amargan nada, a pesar de utilizar la fruta con piel y todo, y que podemos aprovechar para el desayuno o la merienda, incluso para un postre si los hacéis pequeños como los que yo os traigo.

Ahora, antes de ver mi receta, vamos a pasear por los blogs de mis compañeros de juego, que seguro han tenido más inspiración que yo, con el cítrico en cuestión y nos habrán presentado unas propuestas increíbles y deliciosas. ¡Os dejo los enlaces para que podáis visitarlos conmigo!

Elvira: Así se come en Granada

Carabiru: ¡Birulicioso!

Fé: Código secreto 280

Mónica: Dulce de limón

Rebeca: Enganchados a la cocina

Chus: El crepitar de los fogones

Inma: Entre 3 fogones

Ana Navarro: Entre obleas y a lo loco

Raxel: Home and Run

Cristina: DeKooking

Leila: La nueva cocina de Leila

Ligia: Los dulces de Ligia

Silvia Ramos: Mis deliciosas tentaciones

Antxón: Muslo y pechuga

Maribel: Picoteando ideas

Nela: Recetas many

Neus: Roro sacabolas

Kemberlyn: Sonrisa vegana

Melissa: Soy repostera

Marijose: Tapitas y postres

Gisela: Tu hora de la merienda

Silvia: Una pizca de ná

Y ahora vamos con mi receta, espero que os guste!

 

INGREDIENTES: (Para 18 mini cakes o 1 grande)

400 gr de mandarina (6 aprox.)

5 huevos L

175 gr almendra molida

75 gr harina trigo

1 cucharadita de levadura tipo Royal

220 gr azúcar blanca

Para la cobertura: 100 gr chocolate negro especial para fundir, 30 gr mantequilla, 6-8 hojas de hierbabuena y 6-8 cucharadas soperas de leche.

Lavar bien las mandarinas, quitar el pedúnculo y cortar con un cuchillo aquellas zonas de la piel que tengan alguna picadura o mancha.

Poner las mandarinas en una olla con agua fría y colocar sobre el fuego. Calentar hasta que empiece a hervir, entonces retiramos la olla del fuego, sacamos las mandarinas, les secamos la piel y cambiamos el agua de la olla.

Vamos a repetir este proceso 3 veces, para que las piezas de fruta pierdan su amargor. Es decir, volvemos a llevar la olla con agua fría y las mandarinas al fuego hasta que hierva dos veces más y después las dejamos enfriar en un plato.

Partimos las mandarinas en 4 porciones (sin pelar) para que podamos retirar las semillas que tengan dentro y después las trituramos junto a 1 cucharadita de agua de azahar, hasta tener un puré muy fino. Reservamos.

En un bol amplio, batimos los huevos con unas varillas de mano como para una tortilla, le añadimos el azúcar y seguimos batiendo hasta disolverla.

Después agregamos la almendra molida y volvemos a mezclar.

Tamizamos la harina con la levadura y agregamos al bol, integrando todos los ingredientes.

Por último añadimos el puré de mandarinas e integramos con una espátula de cocina.

Si vais a hornear los bizcochitos en un molde rígido, es mejor engrasarlos y enharinarlos un poco antes de verter la masa para que después sea más fácil desmoldar; si son moldes de silicona no es necesario.

Esta masa no sube mucho de volumen por lo que si utilizamos para hornear moldes de mini bundt cake o muffins debemos llenarlos casi hasta arriba, para que la forma del molde quede bien definida.

Horneamos a 180 grados unos 25 minutos para mini bundt cake o 40 minutos si es un molde grande.

Dejamos templar sobre una rejilla y desmoldamos sobre la misma hasta que estén completamente fríos.

Para la cobertura, en un cazo derretimos la mantequilla a fuego bajo, le añadimos la leche y cuando la mezcla empiece a hervir añadimos las hojas de hierbabuena lavadas y escurridas, apagamos el fuego, tapamos el cazo y dejamos infusionar unos minutos.

Retiramos las hojas de hierbabuena, añadimos el chocolate troceado y volvemos a calentar el cazo a fuego lento removiendo de vez en cuando hasta que el chocolate se funda y tengamos una crema brillante. Bañamos con esta crema de chocolate, todavía caliente, los bizcochitos y dejamos enfriar.

Buen provecho!